viernes, 22 de febrero de 2013

Problemas del hormigón impreso


Cada vez recibimos más llamadas acerca de problemas surgidos a raíz de la aplicación del hormigón impreso, desde el particular que hizo un patio y no consiguió localizar al aplicador, hasta el contratista que no cobró la obra que subcontrató a la empresa del hormigón.
Voy a decir cómo están haciendo los políticos hoy en día que no se puede generalizar. Hay excelentes empresas realizando grandes trabajos, pero creo que en general, la bajada de precios está afectando a la salud de este excelente material.
El otro día me llamó un buen amigo y me consultó acerca de un pavimento que pensaba realizar en su terreno. En un principio  sólo le preocupaba contratarlo lo más barato posible. Al final de la conversación cuando le indiqué la serie de riesgos a los que se enfrentaba partiendo sólo de esa premisa, conseguí que cambiara de opinión y esto fue importante para mí.
Debemos salvar a este tipo de pavimentación, y la única forma es apostando por la calidad en la preparación, ejecución, y en los materiales utilizados.
Tan reprochable me parece la actitud del pavimentador que quiere escatimar en productos o pasadas de talocha, como la persona que contrata la obra intentando aprovecharse de la falta de trabajo para conseguir un precio en el que la empresa trabaja sin margen. Debe haber un equilibrio para que al final se obtenga un resultado satisfactorio. Como dijo un hombre sabio “el precio se olvida, la calidad perdura”.
Una de las patologías que más me sorprenden originadas del hormigón impreso es la aplicación del producto o sellador en un día de posible lluvia. La empresa con tal de no perder el jornal acude a trabajar sin pensar en su cliente y las consecuencias. Cuando llueve y el pavimento se vuelve de color blanco, debido a la veladura de la resina, la empresa tiene problemas para cobrar el trabajo, el usuario final se siente engañado, y esto deriva en mucha negatividad. ¿De verdad merecía la pena?
Hace unos meses me comentó un señor de Galicia, cuyo clima es muy diferente al de la zona levante y Andalucía, que cuando le realizaron el pavimento, tardaron un mes en sellar el pavimento hasta que tuvieron seguridad de la inexistencia de lluvias, el resultado fue excelente. Eso es bueno para todos.
Para que no falte la auto crítica, los distribuidores de productos debemos preocuparnos en conseguir materiales de alta calidad aunque suponga mayor precio, y olvidarnos de productos rebajados de calidad que son más económicos y atractivos para el cliente.

Adjunto enlace a un artículo de fibras para hormigón.